Los principios de manejo defensivo están destinados a prevenir circunstancias peligrosas. Al seguir los 5 principios que se enumeran a continuación, los conductores pueden reducir drásticamente los peligros en las carreteras o autopistas, incluso en circunstancias extraordinarias como mal tiempo, badenes como los badenes de San José o cuando otros conductores cometen errores en la carretera.
1 – Respetar la Ley
Este consejo ni siquiera debería ser tan importante. Respetar las normas de tráfico es uno de los elementos más importantes de la conducción defensiva. Después de todo, las buenas prácticas como conducir por debajo del límite de velocidad de la carretera, detenerse por completo en los semáforos y seguir correctamente la calzada son más que reglas.
La propia lógica ya da pistas de que estas posturas aumentan la seguridad vial. Tras ellos se encuentra la primera línea de defensa y protección frente a los accidentes de tráfico.
2 – La regla de los tres segundos
La regla de los tres segundos se refiere a la distancia que el conductor debe mantener con respecto al vehículo que le precede. Significa que, en lugar de pensar en el espacio al medir distancias, el conductor debe saber cómo convertir el espacio en tiempo. Tardamos 1,5 segundos en advertir cualquier objeto que pueda resultar peligroso para nosotros y otros 1,5 segundos en reaccionar y detener nuestro vehículo. Por lo tanto, debemos contar tres segundos entre nuestro vehículo y el vehículo que tenemos delante.
3 – Reducir las distracciones
Si la prevención de accidentes es el objetivo principal de la conducción defensiva, reducir las distracciones es una de las formas más importantes de prevenir accidentes. Hay precauciones básicas como no utilizar el móvil al volante, posicionar el GPS de forma que no se tenga que apartar la vista de la carretera y garantizar al resto de pasajeros que no habrá alteraciones y cambios en el interior del vehículo durante el trayecto. viaje.
4 – Manténgase alejado de los factores estresantes
Evitar a los conductores agresivos siempre es una buena idea. Desafortunadamente, la ira al volante es bastante común, pero involucrarse en disputas de ego y comportamiento agresivo en el tráfico es a menudo la fórmula para la tragedia. Dejarse influenciar por la ira de los demás y meterse en una disputa es un acto irresponsable y peligroso. Este es un comportamiento criminal. Sabemos bien cómo termina. Por lo tanto, cuando encuentre un conductor estresado, lo mejor que puede hacer es reducir la velocidad y dejarlo ir.
5 – Asegúrate de que te vean
Lo peor que puede hacer un conductor mientras conduce es suponer que todos los demás conductores conducen de manera segura o que ven la presencia de otros vehículos. El manejo defensivo involucra la atención del conductor para asegurarse de que otros conductores a su alrededor lo vean. El conductor necesita permitir que otros anticipen sus movimientos y sepan que está cerca.